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A 113 años del sueño de una Villa la Angostura agrícola ganadera

Maíz, trigo y cebada se sembró a orillas del Nahuel Huapi.
Historia
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Un 9 de abril de 1902 el presidente Julio Roca firmaba el decreto creando la Colonia Agrícola Pastoril Nahuel Huapi. Se inscribieron 256 colonos para 133 lotes, pero la mayoría ni siquiera vino al conocer las duras condiciones climáticas de la región. Baratta, Capraro, Colletti, Barbagelata, Marimón, Tierno, Guananja, Paisil, Antriao y Quintupuray, entre los primeros pioneros.

 

Francisco Moreno relata que en su viaje de 1880, al recorrer esta región el Cacique Modesto Inacayal que dominaba estas tierras, había concedido permiso a algunos indios valdivianos labradores para que se establecieran en su campo, encontrando plantíos de maíz, trigo, cebada y varias legumbres.

Moreno dice en sus crónicas que Inacayal mostraba con orgullo entre sus posesiones a una herramienta vital: el arado.”

Al incorporarse administrativamente estos territorios a la Nación, se pensó en favorecer el desarrollo agropecuario.

Cuando se realizó el Censo Nacional de 1895 sobre 76 habitantes registrados en la margen del lago Nahuel Huapi 9 se declararon agricultores. Para impulsar el desarrollo de un pueblo se pensó en crear la Colonia Agrícola, donde se adjudicarían gratuitamente las tierras a los colonos a condición de trabajarlas y ponerlas a producir.

El plan era desarrollar la misma a las márgenes del lago en lotes de 625 hectáreas, involucrando tanto el actual territorio neuquino como rionegrino. 

Ya para 1899 se constató la existencia de algunos pobladores afincados, que manifestaron interés en obtener la titularidad de las tierras que ocupaban. 
La población se fue incrementando rápidamente y el ingeniero Apolinario Lucero que fue nombrado para subdividir las tierras y dar la posesión a los Colonos, registró para entonces 32 establecimientos agropecuarios establecidos.

256 colonos inscriptos

Finalmente el 9 de abril de 1902, el Presidente Julio A. Roca firmó el decreto presidencial que creó la Colonia Agrícola Nahuel Huapi. Tres meses después se habían inscripto 256 aspirantes a colonos solicitando uno de los 133 lotes que la componían.

Los principales requisitos eran que el solicitante ocupara directamente por sí el terreno durante cinco años continuos, residiendo en él, levantando una habitación e introduciendo haciendas que representaran por lo menos un capital de $ 250”. No era mucho si consideramos que un caballo de montar valía $ 25. Además se obligaba labrar en los cinco años por lo menos diez hectáreas y a plantar y cultivar 200 árboles en el lugar más conveniente”. 
Otra posibilidad era comprar el lote por la suma de $ 500 y obtener el título definitivo.

El 18 de setiembre se otorgaron las concesiones, y salvo los ocupantes registrados, de los adjudicatarios que tenían que presentarse en la Colonia para recibir las tierras, muy pocos aparecieron.
Algunos, llegados de Capital, al constatar el arduo trabajo a realizar, desistían de la concesión y regresaban.

Solo aquellos que conocían el lugar y su problemática aceptaron el desafío y lucharon para hacer crecer la Colonia en estas alejadas tierras de la Patagonia. 
Respecto al desarrollo de la Colonia Agrícola Nahuel Huapi, el gobierno para 1908, procurando ampliar la superficie del futuro Parque Nacional, dispuso retirar de la oferta pública a 70 lotes abandonados de los 133 que originariamente componían la Colonia. Considerando además que muchos pequeños establecimientos se superponían sobre terreno se dispuso la subdivisión en superficies menores algunos lotes de la Colonia, reduciendo la superficie de la colonia a 53 lotes de 625 Has.- que pasaron a denominarse Lotes Pastoriles- y 77 chacras de entre 50 a 100 Has, denominados en adelante Lotes Agrícolas.

Paraje Correntoso, Hoy Villa la Angostura

En el Paraje Correntoso fue Federico Baratta el primer colono que legalmente adquirió un lote pastoril de 625 hectáreas, e invitó a venir de Italia a Primo Capraro, con quien se asoció para la explotación de madera y los primeros cultivos.

Con la fundación de la Estanzuela "La Bellunesse" -frente a Lago Espejo- llegaron también los hermanos Colletti para administrar el campo, además de los hermanos Barbagelata, las familias Paisil, Antriao y Quintupuray, éstas llegadas desde la localidad chilena de San Pablo, a unos 21 km de Osorno.   

Trigo angosturense y un premio que sorprendió

Es de resaltar el importante premio obtenido frente al Lago Espejo por la calidad de los trigales sembrados el 22 de mayo de  1910 por este establecimiento La Bellunesse que manejaban los hermanos Colletti. Fue durante la Exposición Rural del Centenario las muestras llevadas por el andaluz José Mora Griega que consiguieron en Buenos Aires una importante distinción.

La calidad de las semillas utilizadas, y que fueran enviadas desde Belluno, a pedido del mismo Capraro, sumado a la fertilidad de la tierra virgen hasta aquella época , lograron tan sorprendente resultado.

La Bellunesse contaba con unas 4 mil hectáreas

La Bellunesse contaba con unas 4 mil hectáreas, y pagaba un canon por el pastaje y uso de la tierra en la Oficina de Pastoreo que se encontraba en el pueblo de San Carlos, hoy de Bariloche.
Esto se debía a que el lote otorgado en forma precaria a Primo Capraro, no estaba dentro de los cedidos por la Colonia Patoril Nahuel Huapi.

También en esos primeros años llegaron las familias Antonio Tierno, Miguel Marimón y Francisco del Rosario Guananja- el primer policía- fueron de los pioneros a la hora de apostar por esta inhóspita y aislada región cordillerana a orillas del Nahuel Huapi. 

Sólo 43 colonos

Para 1909 se realizó una inspección de Tierras y Colonias que constató que algunos lotes no se habían solicitado y que otros estaban abandonados por los concesionarios. Es decir que la ocupación efectiva era de 43 Lotes Pastoriles y 34 Lotes Agrícolas.

En el informe figura el país de origen de los poseedores que nos da una idea aproximada de la conformación de la Colonia: 21 eran Argentinos; 3 Uruguayos; 24 Chilenos; 3 Italianos; 2 Españoles; 14 Alemanes; 8 Suizos; 2 Franceses; 2 Escandinavos. Poblaban además un Belga- José Emmanuel Vereertbrugghen-; y un Sirio- Fortunato Arden-. Del total de los colonos el 14% tenían apellidos indígenas

En cuanto a las herramientas de la Colonia para 1909 se habían contabilizado entres los 77 adjudicatarios de lotes: 102 arados, 6 trilladoras, algunas aventadoras, rastras, rodillos, desnatadoras, contando el colono Luis Pefaure con el único motor a caballo de los alrededores. En realidad, la fuerza motriz de la Colonia la proporcionaban los 312 bueyes registrados.

Para el transporte los colonos contaban con carros y algunos centenares de caballos y yeguarizos. También con una docena de botes, algunos con vela.

Las primeras produciones de alimentos y bebidas

Hubieron en los inicios de la Colonia Agrícola del Nahuel Huapi y alrededores algunos emprendimientos de fabricación de alimentos y bebidas que merecen destacarse como por ejemplo en la Estancia Huemul: un tambo con fábrica de quesos y manteca.

En la estancia El Cóndor: el vasco Babil Azcona logro una producción de tomates que superaba la demanda local -única posibilidad de venta- ya que las dificultades del transporte hacían impensable el traslado a otros centros poblados. Comenzó entonces con una fábrica de salsa de tomates, de efímera duración por las dificultades del envasado.

También en el Cóndor el vecino Claudio Bernal inició la fábrica Bariloche de Limonada y refrescos con frutas regionales. Se mantuvo desde 1917 hasta la llegada masiva de productos similares con envases de marca.