Mediante una carta un grupo de padres y docentes hicieron conocer su queja por un hecho donde unos 30 niños no pudieron utilizar el servicio de la empresa Linsa y se quedaron a pie, en la zona del puerto donde ahora funciona provisoriamente la escuela.
Mediante una nota firmada por un grupo de padres y docentes se dio a conocer un incidente con la empresa local, Linsa SA, por la cual los niños quedaron a pie tras una jornada de estudio en la Escuela 361, que funciona actualmente en el Planta de Campamento.
En la carta recuerdan que previamente se reunieron los padres con nla empresa “a fin de que al menos los alumnos del turno tarde accedieran al transporte escolar, como tienen todos los alumnos de la Villa, pero la empresa se negó aludiendo a la lejanía de la misma”.
Según se acordó los niños que concurren al turno tarde utilizarían el servicio de las 17:40 y aclara Flavia Kittl en la nota que “los días previos, como directora, verifiqué personalmente que el chofer de colectivo supiera que nuestros alumnos iban a subir en la parada que corresponde, acordamos donde se iba a detener, donde iban a realizar la fila los alumnos. Es decir, crucé la calle, detuve el colectivo y mantuve conversación con el chofer para coordinar todos los aspectos mencionados. Cabe mencionar que la calle es de alto tránsito y muy peligrosa para los niños”
Sin embargo aseguran que el 7 de abril el micro nunca pasó. La docente explica que "todos los días esperamos hasta que todos suben al colectivos, en el día de ayer, los niños estaban acercándose a la vereda y el colectivo pasó de largo” y aclara que ante el reclamo de padres y docentes el chofer les contestó “no soy transporte escolar, es urbano/turístico”.
Se recuerda que en principio se utilizaba el micro municipal "Salchicha" pero un problema en los frenos hizo que se tuviera que retirar de servicio, con la promesa que en los próximos días volvería a cumplir este servicio adicional hasta tanto el establecimiento se traslada al quincho y albergue municipal, donde funcionará la escuela hasta tanto se construya el edificio propio, hecho que demorará al menos 2 años entre el llamado a licitación y la construcción propiamente dicha.