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Envían a prisión a Andrés Cahuimpan y Nahuel Hernández

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El juez Mariano Etcheto hizo lugar al pedido del fiscal que pidió que se les imponga la prisión preventiva a los imputados tras el fallo del TSJ. La querella adhirió al planteo de la fiscalía. El magistrado dispuso que la preventiva sea por 90 días hasta que la sentencia condenatoria esté firme. 

Nahuel Hernández y Andrés Cahuimpan, quienes fueron condenados a 11 años de prisión por el homicidio de Rodolfo Barría, serán enviados hoy a una unidad de detención de la provincia porque el juez Mariano Etcheto les impuso la prisión preventiva durante 90 días.

El fiscal jefe Fernando Rubio informó hace minutos, tras la finalización de la audiencia, que se hizo a las 13 en el juzgado local, que el juez hizo lugar al pedido de la fiscalía para que les imponga la prisión preventiva a los jóvenes. A criterio del fiscal, luego de que se difundiera la sentencia del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de la provincia, que confirmó la sentencia condenatoria contra los jóvenes, se cumple el requisito de doble conforme. En consecuencia, Cahuimpan y Hernández deben ir a prisión.

El abogado y concejal del MPN Guillermo Hensel en su carácter de apoderado de los familiares directos de Barria, que son querellantes en la causa, adhirió al pedido del fiscal. Rubio dijo que el juez ordenó que Cahuimpan y Hernández sean trasladados con custodia policial hasta sus domicilios para buscar sus pertenencias y, luego, serán enviados a una unidad penitenciaria.

Es probable que sean alojados en el penal de Junín de los Andes, señaló una fuente que participó de la audiencia. Rubio señaló que Etcheto dispuso la prisión preventiva durante 90 días hasta que la sentencia condenatoria quede firme. La defensa se había opuesto. A la defensa de Cahuimpan y Hernández aún le queda la posibilidad de interponer un recurso extraordinario federal para intentar llegar hasta la Corte Suprema.

Los familiares de Barría destacaron la decisión de que los imputados vayan a una unidad penitenciaria, informó una fuente que estuvo en la audiencia. El TSJ resolvió rechazar en un fallo unánime el recurso extraordinario que había presentado el abogado Ricardo Mendaña, que defiende a Hernández y Cahuimpan y, en consecuencia, confirmó la sentencia que condenó a los jóvenes a 11 años de prisión como autores penalmente responsables del homicidio de Barría. El fallo del TSJ se difundió ayer al mediodía.

El hecho atribuido

Los jóvenes fueron declarados responsables del homicidio simple de Barría por un jurado popular a principios de octubre de 2014. En el juicio por jurados se estableció que la agresión contra Barría ocurrió la mañana del 9 de abril pasado. Hernández y Cahuimpan atacaron con golpes de puños, patadas y un rodillazo a Barría, y le ocasionaron lesiones en el cuerpo, entre ellas un traumatismo de cráneo, que generó un hematoma subdural agudo en el hemisferio izquierdo de su cabeza, lo que provocó su muerte, luego de una agonía de seis días.

Murió el 15 de abril pasado a los 36 años, en el sanatorio HPR de Bariloche. En diciembre pasado, el juez Leandro Nieves les impuso 11 años de prisión a los imputados. El veredicto del jurado popular y la sentencia condenatoria fueron confirmados a finales de marzo por el Tribunal de Impugnación, que rechazó los recursos de la defensa.

El defensor de los imputados recurrió el fallo ante el TSJ que resolvió desestimarlo y confirmar la sentencia condenatoria de primera instancia. Etcheto había concedido en enero pasado el beneficio de la prisión domiciliaria a Cahuimpan y Hernández a petición de la defensa.

El fiscal y la querella se opusieron. A principios de abril último, Etcheto prorrogó durante 90 días la prisión domiciliaria de los imputados a pesar de la negativa de la fiscalía y los querellantes, que habían solicitado que Cahuimpan y Hernández vayan a prisión luego de que el Tribunal de Impugnación de la provincia resolviera a finales de marzo pasado confirmar el veredicto del jurado popular y la sentencia de 11 años de prisión. Hoy, tras el fallo del TSJ, dispuso la prisión preventiva para los jóvenes condenados, que cumplirán en un penal.