Con el nacimiento del esquí en 1934 en nuestra región, se realizó un estudio para analizar dónde construir el mejor centro de esquí, resultando elegido el Cerro Dormilón, que dependía de la Sección Correntoso del Club Andino, hoy Villa la Angostura.
El Dormilón resulta, sin lugar a dudas, el mejor lugar de toda la región para la práctica de esquí. Un informe solicitado en 1937 por la Administración de Parques Nacionales a especialistas confirma que "este Cerro dispone de excelentes pistas de esquí, de moderada a mediana pendiente, existiendo zonas de pronunciadas pendientes hacia el oeste, donde las precipitaciones de nieve son importantes, permaneciendo la nieve en primavera y a veces hasta el verano, haciéndolo apto para disfrutar del esquí de travesía y/o fondo, aún en primavera y a principios del verano”.
Cuatro meses de nieve todo el año
Las características geográficas, así como su orientación a los vientos y el sol, le permite mantener nieve unos cuatro meses al año, además, duplica y hasta triplica la cantidad de nieve que acumula si se lo compara con el Cerro Bayo.
Si bien el Cerro Dormilón se encuentra en tierras que actualmente son propiedad de Parques Nacionales, también lo eran las hectáreas donde hoy se proyecta el futuro Centro Invernal Las Provinciales.
La historia se inicia en 1936 cuando el Directorio de Parques Nacionales decide incentivar la actividad de deportes de invierno para lograr una mayor difusión a nivel mundial del Parque Nacional Nahuel Huapi.
En aquellos años se iniciaron las actividades de esquí en el Cerro Otto, que por su proximidad a Bariloche era el que más se prestaba en aquellos iniciales momentos. Sin embargo debido a su reducida altitud y su exposición al predominante viento del oeste, no podía representar sino un lugar de uso provisorio.
Un centro de esquí de prestigio internacional
La opinión generalizada de los entusiastas de la época era que el Cerro Dormilón se indicaba como el más adecuado para llegar a crear un centro de esquí con prestigio mundial.
A tal efecto el Directorio del Parque - y por indicación expresa del Dr. Exequiel Bustillo – contrató al ingeniero Julio Furth que realizó un estudio de factibilidad en el Cerro Dormilón a los efectos de instalar un alambre carril y demás construcciones que darían vida al centro de esquí deseado.
Simultáneamente, y por gestión de la condesa Angélica Gainza Paz de Di Sangro, esposa del conde italiano Nicolás Di Sangro y con una propiedad en Villa la Angostura, llegó al país contratado por Exequiel Bustillo el campeón mundial de esquí Hans Nobel quien había organizado el centro de esquí en Sestriere.
En 1937 Hans Nobel firmó en Buenos Aires un convenio con Parques Nacionales. Esta repartición le costeaba los gastos de los pasajes ida y vuelta Europa-Buenos Aires, y de allí en ferrocarril hasta Bariloche y el hospedaje mediante una colaboración de Eduardo May, dueño del Hotel Parque.
A su vez, Hans Nobel debería realizar un estudio de la zona donde construir un centro de esquí, y dar lecciones a quienes así las solicitaran al horario y tarifas que se establecieran.
El Cerro Dormilón, el elegido
Este profesional, al visitar el Cerro Dormilón, no tuvo dudas: era el sitio exacto para ejecutar el proyecto. En segundo lugar se consideraba la opción del Cerro Catedral.
El desarrollo se realizaría desde Villa la Angostura, llegando por tierra y embarcado hasta el Cerro cruzando el Nahuel Huapi.
Foto: Turistas embarcando para poder cruzar el Nahuel Huapi y llegar al Cerro Dormilón desde el paraje Correntoso, hoy Villa la Angostura.(Ayerza Dolores)
Sin embargo, ante las dificultades que representaba por la poca o casi nula infraestructura que tenía la localidad por entonces, y que quedaba muy a trasmano de Bariloche quien llevaba adelante la iniciativa, se decidió por la segunda opción: El Cerro Catedral.
Yayo de Mendieta
Villa la Angostura